- Ozempic es un medicamento que ha levantado alarmas a nivel mundial por el mal uso que las personas le están dando.
- Aunque se trata de un remedio para diabetes tipo 2, la demanda del medicamento se ha disparado por su efecto adelgazante.
Por Melina Barbosa con información de Francisca Toledo de Mala Espina
¿Sabes qué es el Ozempic? Este medicamento se ha hecho famoso por sus supuestos efectos para reducir el peso, aunque en realidad se trata de un remedio para la diabetes tipo 2.
El Ozempic, además, ha sido relacionado con la generación de un tipo anormal de ceguera en los usuarios, así lo indica un estudio reciente del centro de investigación de la Universidad de Harvard, Mass Eye and Ear.
Por esto es importante que sepas los efectos de este medicamento que se encuentra disponible en México, pero bajo ciertas condiciones médicas.
¿Qué es el Ozempic?
El Ozempic es un fármaco utilizado como monoterapia «para pacientes con diabetes en casos de contraindicación o intolerancia a la metformina».
En México, el Ozempic no es de venta libre, por lo que se vende solo con receta y bajo vigilancia médica debido al principio activo que contiene el producto.
De acuerdo con la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS), el Ozempic cuenta con autorización sanitaria vigente solo para ser indicado en adultos con diabetes mellitus tipo 2 con ciertas características.
«Cualquier otra indicación terapéutica no se encuentra autorizada por esta Autoridad Sanitaria, entre ellas para la pérdida de peso. Además, este producto está clasificado como medicamento de fracción IV, que de conformidad con el artículo 226 de la Ley General de Salud, para poder adquirirlo se requiere de receta médica», explica la COFEPRIS en un comunicado de 2023 que advierte de la falsificación del Ozempic y su comercialización ilegal.
El Ozempic (Semaglutida) es un medicamento que ayuda al páncreas en la liberación de insulina. De esta manera, la Semaglutida ayuda a liberar la correcta cantidad de insulina y, como consecuencia, reduce el nivel de azúcar cuando está muy elevado.
Profesionales de la salud han explicado que el medicamento «cambia el sistema metabólico, de manera tal que las personas absorben los carbohidratos y los elimina más rápido».
Es así que logra controlar la diabetes mellitus tipo 2, además de prevenir posibles enfermedades cardíacas. Esto, siempre y cuando la persona que tome el fármaco padezca de la enfermedad.
En el caso contrario, el Ozempic puede generar efectos adversos serios y hasta resultar en consecuencias fatales.
Según una nota informativa del Instituto de Salud Pública de Chile, tomar Ozempic sin tener diabetes puede producir los siguientes efectos:
- Náuseas
- Diarrea
- Vómitos
- Pancreatitis aguda
- Hipoglicemia
- Aumento de la frecuencia cardíaca
- Complicaciones por retinopatía diabética
La sobredemanda de Ozempic
Desde que se popularizó el fármaco por su efecto adelgazante, muchas personas con diabetes regresan a casa sin haber podido comprar Ozempic.
Profesionales de la salud refieren que a los pacientes les cuesta trabajo encontrar el medicamento y la pluma con la que se inyecta, por lo que han tenido que hacer reajustes de tratamiento y recetar semaglutida oral como Rybelsus.
Sumado a la escasez del medicamento, su costo resulta tan elevado que la Organización Mundial de la Salud (OMS) no lo recomienda como tratamiento.
En su lugar, la OMS refiere que hay tratamientos más asequibles para la diabetes que tienen efectos sobre la glucemia y el riesgo cardiovascular similares a los de los fármacos de la familia de la semaglutida.
«Los medicamentos que contienen fármacos de la familia de la semaglutida no forman parte de los tratamientos recomendados por la OMS para controlar la diabetes, debido a su elevado costo actual. Este costo supone un obstáculo que hace que estos productos no resulten adecuados desde el punto de vista de la salud pública, cuyo propósito es facilitar a la población el acceso más amplio posible a los medicamentos, además de encontrar un equilibrio entre las normas de atención consolidadas y las posibilidades de aplicación a gran escala en los lugares que disponen de pocos recursos», señala la OMS en una alerta emitida el pasado 20 de junio de 2024.