EN CORTO
- La vacuna demostró ser segura en menores y tiene una eficacia del 90.7% tras la aplicación de 2 dosis, según los resultados del ensayo clínico fase 2/3 que fueron publicados en una revista científica.
- Utiliza una tecnología denominada ARN mensajero. En los niños de entre 5 y 11 años se administra una dosis 3 veces más baja que la que se usa en personas de 12 años o mayores.
Especial
La vacunación para niños y niñas es ya una realidad en muchos países, por ello es fundamental contar con información precisa sobre las vacunas ya que puede ayudar a detener los mitos y rumores más comunes al respecto.
En esta nota te contamos lo que sabemos sobre la vacuna Pfizer en niños y niñas.
Eficacia y seguridad
La vacuna Comirnaty (BNT162b2), desarrollada por el laboratorio Pfizer y la compañía de biotecnología BioNTech, utiliza una tecnología conocida como ARN mensajero (ARNm).
En los niños de 5 a 11 años, se administra en una dosis más baja (10 microgramos) que la que se usa para personas de 12 años o mayores (30 microgramos).
El ensayo clínico de fase 2/3 fue realizado en Estados Unidos, España, Finlandia y Polonia e incluyó aproximadamente a 4 mil 500 niños de 5 a 11 años de edad.
Según los resultados publicados en la revista científica The New England Journal of Medicine, la vacunación con 2 dosis (de 10 microgramos) administradas con 21 días de diferencia es inmunogénica (induce una respuesta inmune) y tiene una eficacia del 90.7% en este grupo etario.
Además,el estudio concluyó que la vacuna es segura. Se controlaron los efectos secundarios de las y los niños a los que se les administró la vacuna durante al menos 2 meses después de la segunda dosis.
Por lo general, los efectos secundarios fueron leves y similares a los observados en adolescentes y adultos. Los más comunes: dolor en el lugar donde se administró la inyección, fatiga, dolor de cabeza, escalofríos, dolor corporal, fiebre, ganglios linfáticos inflamados, náuseas y disminución del apetito.
A diferencia de muchos medicamentos, la dosis de la vacuna contra el COVID-19 no varía según el peso del paciente pero sí por la edad que tenga el día de la vacunación. Las y los adolescentes de 12 años de edad o más reciben la misma dosis de la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer-BioNTech que los adultos. Para los niños niñas de 5 a 11 años, reciben una dosis acorde a la edad de la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer-BioNTech.
Aprobada en varios países
La de Pfizer es la vacuna autorizada en el país para los menores de 11 años, aunque en lugares como Argentina, la vacuna Sinopharm, desarrollada en China, fue autorizada para la vacunación de niños de entre 3 y 11 años en octubre último.
El 29 de octubre de 2021, la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) autorizó el uso de emergencia de la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer/BioNTech para incluir a niños de 5 a 11 años de edad. El 25 de noviembre último, lo mismo hizo la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés).
Actualmente, esta vacuna se encuentra aprobada para su uso en132 países y específicamente para niños de 5 a 11 años se encuentra aprobada en Estados Unidos, Canadá, Brasil, Chile, Uruguay, Costa Rica, España, Francia, Italia, Bélgica, Finlandia, Australia, entre otros países.
Hasta el momento, la Organización Mundial de la Salud (OMS) no ha autorizado ninguna vacuna para niños menores de 12 años. Sin embargo, aclaró que “los países son autónomos de definir y decidir su estrategia de vacunación tomando como base las recomendaciones de su Autoridad Regulatoria”.
Por qué vacunar a niñas y niños
Como explicamos en esta nota, los niños pueden contagiarse y transmitir el virus como los adultos. Si bien es cierto que la mayoría de los niños transitan la COVID-19 de forma asintomática o con cuadros leves, algunos de ellos pueden tener síntomas persistentes (como dificultad respiratoria o fatiga).
En el caso de niños con enfermedades de base y también menores de 1 año, pueden sufrir formas graves de la enfermedad y requerir hospitalización.
También es una forma de prevenir el síndrome inflamatorio multisistémico (SIM) post COVID-19, una respuesta inflamatoria exacerbada que se puede presentar en niñas y niños sin enfermedades de base después de haber tenido la infección. Además, la vacunación pediátrica contra la COVID-19 tiene un rol en fortalecer la presencialidad cuidada en las escuelas.
Esta nota fue publicada originalmente por Chequeado