ÁGORA
Por Carlos Garza Herrera*
El mundo está cambiando: a la necesidad de reformar los sistemas económicos y atender la crisis climática, se sumó el fenómeno inesperado del COVID-19. En el camino a la recuperación de la pandemia, todas las economías del mundo se replantearon su responsabilidad hacia un mejor futuro para las personas y para el planeta.
El sector privado es parte fundamental de este proceso. Por eso, la Iniciativa Capitalismo Social del Centro Eugenio Garza Sada busca generar información de valor que ayude a asumir ese rol con firmeza.
Para contribuir a este propósito, se presentó la Segunda Encuesta de Percepción sobre el Empresariado y el Capitalismo, con representatividad estadística de la zona metropolitana de Monterrey. A continuación detallamos cinco hallazgos clave.
El 83 % de las personas tiene una opinión positiva sobre el empresariado. Esto representa un incremento de seis puntos con respecto a lo medido en 2020. Llama la atención que mejora la percepción en un año de pandemia, lo cual pudiera implicar que se valora a quienes dan empleo en un contexto de dificultad económica.
En términos de confianza, el 66 % dice confiar mucho o algo en las y los empresarios. También se observa un incremento con respecto al año anterior. (68% vs. 62%).
A pesar de este panorama, también llama la atención que la percepción de corrupción en el sector ha crecido. Vale la pena explorar la disonancia entre estos dos puntos de vista.
Se observa un incremento en la expectativa de que el empresariado se involucre en la solución de problemas públicos de 68 % a 73 %.
Concretamente, los asuntos que la ciudadanía identifica son mejorar salarios y prestaciones, medio ambiente, sustentabilidad y cambio climático, reducir la desigualdad, así como combatir la corrupción y promover la cultura de la legalidad.
La ciudadanía en Monterrey confirma la idea de que la razón de ser de las empresas no puede ser solo conseguir la rentabilidad.
Deben procurar el bienestar de sus grupos de interés como empleados, proveedores y comunidades en las que operan (94 % de acuerdo). Esto valida la necesidad de reorientar las estrategias de acción y comunicación de las empresas.
Se observa un incremento en la percepción de que las élites se siguen haciendo más ricas mientras la gente común batalla para pagar sus cuentas (80 % vs. 77 %).
El resultado denota una sensación de injusticia inherente al sistema. Es importante reconocer este punto de vista y tomar acciones para revertir el resultado y mitigar la percepción.
La ciudadanía considera que el sistema económico actual permite el emprendimiento y genera empleabilidad, pero percibe que puede hacer más por reducir la desigualdad y la pobreza.
Sumado a la percepción positiva del empresariado, la expectativa de involucramiento en problemas públicos y la buena recepción de las ideas ligadas al capitalismo social, se configura un escenario propicio para promover la conversación pública sobre este tópico.
ÁGORA es un espacio de reflexión del Consejo Nuevo León
* Ingeniero civil y maestro en Administración Pública y Política Pública por el Tecnológico de Monterrey, así como egresado del Global MBA del Tec y Thunderbird School of Global Management. Fue fundador, director general y miembro del consejo directivo de la asociación civil Paz Es ABP. Además de ser consejero en diversas organizaciones de la sociedad civil y profesor del Tec, encabeza la Iniciativa Capitalismo Social del Centro Eugenio Garza Sada.