Por Debanhi Soto
El 14 de agosto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció nuevos brotes de viruela del mono (mpox) y declaró la enfermedad una Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional (ESPII).
Tras el resurgimiento de la ESPII, se han replicado desinformaciones sobre las medidas que se tomarán para tratar la enfermedad, las causas de la misma, entre otras. Algunas de estas narrativas ya habían circulado en 2022 cuando un brote mundial de mpox ya se había declarado una emergencia de salud pública.
No, la OMS no pidió otro confinamiento mundial debido al mpox
Usuarios en X (antes Twitter) indican que debido al brote de mpox (antes llamado viruela del mono), la Organización Mundial de la Salud impondrá “confinamientos domiciliarios masivos” y otras restricciones que se aplicaron durante la pandemia de COVID-19.
Sin embargo, esto es falso, hasta el momento la OMS no ha decretado tales restricciones por la enfermedad.
El 14 de agosto de 2024 el director general de la OMS, Tedros Ghebreyesus determinó que el recrudecimiento del mpox en África (especialmente en la República Democrática del Congo) constituye una Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional (ESPII).
El doctor Ghebreyesus informó que si bien se emitirán recomendaciones temporales a los países afectados, no ha ordenado una cuarentena obligatoria como indican las publicaciones de redes sociales.
Sobre el estatus de ESPII, un vocero de la OMS comentó con medios de comunicación que de acuerdo al reglamento sanitario internacional, la declaración de emergencia implica que todos los países del mundo deben tomar medidas para frenar la expansión del virus como la investigación para la creación de vacunas
«La alerta implica que los países afectados deben colaborar más estrechamente con los organismos sanitarios internacionales y los países vecinos para coordinar sus respuestas, intercambiar datos e investigaciones y participar en los esfuerzos mundiales para desarrollar vacunas y tratamientos», le dijo un vocero de la OMS a BBC Mundo.
Asimismo, la OMS ya puso en marcha el procedimiento de inclusión de las vacunas contra la mpox en la lista para uso de emergencia, lo que aceleraría el acceso a los inmunizantes en países de ingreso más bajo.
No, el mpox no es herpes o un efecto secundario de las vacunas anticovid
Circula un video en el que supuestamente un médico alemán afirma que el mpox es una reacción del cuerpo a las vacunas anticovid y que en realidad la enfermedad se trata de herpes zóster.
No obstante, el virus causante del mpox es distinto al del herpes zóster y no se ha encontrado una relación entre las vacunas COVID y la viruela del mono.
Si bien, es cierto el mpox y la herpes zóster pueden tener ciertos síntomas similares como fiebre, escalofríos, malestar general y lesiones en la piel, son enfermedades causadas por distintos virus.
En el caso del herpes zóster, el causante de la enfermedad es el virus de la varicela-zoster, mientras que en el mpox el agente patógeno es un virus del género orthopoxvirus, familia que incluye al virus variola, (causante de la viruela).
De acuerdo a Adriana Morales, médico miembro de la Sociedad Peruana de Enfermedades Infecciosas y Tropicales, aunque ambas enfermedades generan lesiones en la piel hay una diferencia física en la forma y el tamaño de las mismas que permite identificarlas.
En cuanto a la supuesta relación entre el mpox y la vacunación contra la COVID-19, diversas organizaciones de fact checking ya han verificado esta desinformación y han concluido que no existe tal conexión ya que las vacunas no tienen capacidad de “crear” virus y menos uno que no pertenezca a la familia de los coronaviridae.
No es una enfermedad que solo se contagie entre la comunidad LGBTIQ+
Diversas publicaciones en redes sociales estigmatizan a la comunidad LGBTIQ+ indicando que el mpox es una enfermedad que se propaga exclusivamente entre las personas de la diversidad sexual.
Para argumentar sus comentarios, se usa la estadística de que el 90% de la población que se enfermó de viruela del mono en 2022 en Estados Unidos se trataba de hombres que se identificaban a sí mismos como gays o bisexuales.
Si bien esta estadística existe, lejos de plasmar una realidad que permita tomar decisiones informadas, ha servido para estigmatizar y ejercer discurso de odio contra la comunidad LGBTIQ+.
“¿De qué sirve entonces todas las estadísticas y números que leemos en los medios? ¿Para qué hablan de la cantidad de gays y bisexuales con viruela del mono? Esta información que se dice objetiva debe servir para tomar acciones concretas pero solo se la utiliza para responsabilizar a un sector de la sociedad y no para formular las respuestas sanitarias urgentes.” escribió el activista argentino Lucas Gutiérrez para la Agencia Presentes.
Al respecto, ONUSIDA señaló en 2022 que el lenguaje estigmatizante con el cual se cubre la viruela del mono pone en peligro la eficacia de la respuesta que se le pueda dar al brote y que solo sirve para reforzar estereotipos homofóbicos.
Asimismo, la OMS informó el 14 de agosto que a pesar de que existe una cepa del mpox que es sexualmente transmisible, hay otras formas en la que una persona puede contraer la enfermedad como:
- El contacto estrecho con una persona infectada
- Tocar objetos contaminados con el virus: utensilios para comer, material médico, ropa de cama, entre otros)
- Ser arañado o mordido por un animal enfermo.
- Preparar o comer carne de un animal infectado
No, la mpox no es una pandemia aún
Otra narrativa compartida por medios de comunicación y usuarios de redes sociales es que el mpox es «la nueva pandemia». Una afirmación que como argumento usa la declaración de la OMS de categorizar el brote de mpox como una Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional (ESPII).
Aunque, de acuerdo al manual de Regulaciones Internacionales de Salud de la OMS, un brote de una enfermedad se puede clasificar como una ESPII siempre y cuando «pueda representar una posible preocupación para la salud pública internacional, incluidos aquellos (brotes) de causas o fuentes desconocidas»
Además, cuando haya brotes de viruela, poliomelitis, influenza humana, síndrome respiratorio agudo severo (SARS), cólera, peste neumónica, fiebre amarilla, fiebres hemorrágicas virales (como el Ébola), fiebres del Nilo Occidental o de otras enfermedades de especial preocupación nacional o regional (como el dengue) se debe analizar su impacto para darles el estatus de ESPII.
Otros valores importantes para considerar para declarar a una enfermedad como Emergencia de Salud Pública son: si el evento es inusual, si tiene un riesgo de propagación internacional y cuál es el impacto que tiene en la salud pública de la región.
Por otro lado las palabras epidemia y pandemia sirven para medir el alcance de una enfermedad a nivel geográfico.
El Diccionario de Términos Médicos de la Real Academia Nacional de Medicina define epidemia como: «Enfermedad que aparece en una comunidad, en una zona o en un país durante un período de tiempo determinado y que afecta simultáneamente o de forma sucesiva pero ininterrumpida a un gran número de personas.»
Mientras que una pandemia es una «Epidemia de una enfermedad contagiosa que se extiende por gran parte o la totalidad del mundo afectando a un amplio número de personas».
La viruela del mono es una enfermedad que está registrando brotes principalmente en la República Democrática del Congo y en otros países vecinos como Burundi, Kenya, Rwanda y Uganda.
Pero, se considera podría expandirse en África e incluso fuera del continente, por lo que la OMS le categorizó como ESPII; sin embargo al no tener un alcance multicontinental (al momento de publicación de la nota) todavía no se le puede denominar pandemia.